Esta plaga no estaba presente en la mayoría de los frutales, solo se encontraron en una hilera de manzanos y en 2 o 3 perales, el problema con esta plaga es que sus larvas viajan hacia el centro del fruto se alimentan de las semillas y en su viaje de vuelta al exterior crean una o mas galerías que no son muy agradables a la hora de comer los frutos y que además son puerta de entrada a otras infecciones.